sábado, 8 de enero de 2011

Deforestación por Jesús

Deforestacion por Jesús
Por: Gunther A. Hasselkus S.

Hoy caminaba regreso a casa después de un maratónico esfuerzo en los Viveros de Coyoacán, cuando en la lateral de Churubusco me percaté de que yacía, solitario y hasta magreado (si me permiten decirlo) un pino...sí, de esos que cada 7 de enero se lanzan al olvido después de una efímera temporada navideña que recuerda lo trogloditas que somos...

En tiempos donde se puede armonizar el ambiente con aromas artificiales y donde hay pinos de plático de magnífica ergonomía, aquí en México seguimos impulsando la deforestación, motivados por una tradición al más puro estilo de la tauromaquia y que sin lugar a dudas fomenta el "cariño" de los niños por la naturaleza, haciéndoles creer que dos semillas bajo tierra son justificación para talar un arbol.

Quiero creer que la psicología de masas tiene mucho que ver, que la maldita pose social sigue siendo factor determinante para que año con año nadie se percate de lo insulso que representa talar un arbol por egoísmo, por frivolidad, por despilfarrar dinero que escasea y por qué no decirlo, vivir cómodos bajo la siempre sensata opinión y nula intervención de instancias gubernamentales.

En fín, sólo quise externar esto para que algún día empecemos a cambiar con detalles semejantes que parecen insignificantes a simple vista pero que comprender la educación de un pueblo, esa misma de la cual carecemos.